-Por todas esas cosas que haces por mí, por todas las veces que has tenido que aguantarme día y noche deprimida y aún así has insistido para verme sonreír, por todos esos consejos llenos de cosas buenas, por todos esos abrazos que me has dado cuando he estado mal, por ponerte en mi lugar muchas veces y comprenderme, y no hacerme sentir culpable de todo, por apoyarme en cualquier cosa aunque no estés de acuerdo conmigo...
Pase lo que pase, quiero que nunca acabe esto, porque te quiero.
Anna escribía con las emociones a flor de piel, siempre agradeció a la vida el maravilloso regalo que la había entregado, Daniel. Desde que se conocieron congeniaron a la perfección y el amor llegó, superaron los baches más profundos, se elevaron hasta el cielo y contaron las estrellas juntos. Al principio de su relación la felicidad parecía completamente efímera pues no pasaban ni 2 días y ya habían peleado. Pero el amor mueve montañas y tropezaron, se levantaron y prometieron estar para siempre juntos, cada caída les hacía más fuerte, cada día su relación era más sincera y mas fuerte. Y mañanra llegará el día, el día con más responsabilidades y nervios de toda la vida de Anna, el día de su boda. Suspiraba y suspiraba, estaba completamente segura de que el paso que iba a dar en su vida la cambiaría por completo porque cuando quieres a alguien, lo arriesgas todo y no te importan las consecuencias.
Termina de escribir esas bonitas palabras para el que será su esposo hasta que la muerte los separe y se dispone a salir hacia casa de su hermana para que la ayude a prepararse para este gran día. Llama al telefonillo, aún queda un día para el "si quiero" pero está muy nerviosa, no hace más que respirar hondo.
-¿Si? -contesta la hermana-
-Berta, soy yo ábreme.
Berta la abre la puerta del portal y Anna coge el ascensor hasta el quinto piso, en el trayecto se mira en el espejo y repite en su cabeza "Saldrá bien". Al llegar a la puerta, Berta la esperaba con los brazos abiertos, Anna la sonrío y comenzaron a arreglarse, se probó los tacones, bastante altos y elegantes para acostumbrarse y que mañana no la rozasen
-Uf.. estoy de los nervios... Todos los preparativos, los invitados...
-No! Relájate, está todo perfecto -Berta abraza a su hermana para tranquilizarla- Y ahora vete a casa a dormir para estar guapa, es una orden -la sonrie simpática-
-Vale -la responde con media sonrisa y se abrazan-
Anna se va , solo son las 22.00 de la noche pero mañana se tiene que levantar pronto y tiene que estar como una rosa. Cierra la puerta y se dirije hacia su habitación, se sienta en la cama y acaricia la pulsera con la que Dani la pidió matrimonio. El sonido de su móvil la saca de sus pensamientos, lo coge rápidamente sin mirar siquiera quien es
-Llamaba para ver si te habías arrepentido -Anna ríe levemente al oír su voz-
-No, no pienso arrepentirme
-Aún puedes cambiar de idea...
-Te estás echando atrás?-silencio- En serio?
-He estado esperando más de dos años para casarme contigo. Me voy a mis despedida de soltero, cari
-En esa fiesta... habrá striperss?
Dani ríe levemente -No creo, solo bebida y buenos amigos. Adiós Annita, te veré en el altar-cuelga-
Despues de la llamada Anna apaga la luz de la habitación, se pone su pijama y se dispone a dormir.
-No te dije que tenías que dormir? -la regaña Berta mientras intenta taparle las ojeras-
-Lo siento -niega con la cabeza- tuve una pesadilla. Nervios por la boda...
-Puedo ayudar? -aparece Mónica, su otra hermana- Arreglándola el pelo
-Claro! -Berta cede su sitio a su hermana mayor y ésta se pone manos a la obra-
-Anna, Berta?! -una tercera mujer aparece a la entrada de la casa-
-Estamos aquí mamá -contesta Berta-
-Ah! Dios mío estás preciosa -dice Carmen llena de emocion- Mierda mi rimel -se quita rápidamente las lágrimas- Jordi pasa, mira a la niña!
-Seguro? No quiero molestar -entra tímidamente a la habitación-
Anna se levanta sorprendida con una sonrisa de oreja a oreja
-Pensamos que necesitarias algo azul -dice su madre-
-Y algo viejo también -prosigue su padre abriendo una caja de la que se puede ver un colgante con un precioso zafiro. Anna lo coge con cuidado y lo observa detenidamente- Pertececió a la abuela
-Es precioso- dice Anna emocionada- Muchas gracias
Berta le coloca el colgante y se crea un silencio bastante emotivo hasta que Mónica, la hermana mediana rompe el hielo
-Es hora de ponerse el vestido!! -lo coge con cuidado de detrás de la puerta-
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Los invitados comienzan a llegar, se saludan, hablan y se ríen, al lado del altar esta Dani con su familia a los que aprecia mucho, le hacen bromas y bobadas para que se olvide aunque sea un segundo de que está a punto de casarse. Los minutos pasan y los nervios se acentúan cada vez más, Dani se balancea hacia delante y hacia atrás, saluda a los invitados recién llegados y suspira una y otra vez.
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Anna esta a punto de salir hacia la iglesia, suspira una y otra vez, mira al cielo buscando a algo o a alguien, luego mira al suelo, respira hondo una vez más y sale del coche adornado especialmente para la boda con la cabeza bien alta y una enorme sonrisa. Anna decidió que el padrino fuese Flo y no su padre, no por ninguna razón en especial, pero quería que Flo tuviese un papel importante en este día
-Preparada, Anna?
Suspira por ultima vez y se agarra a su brazo apretandolo con fuerza. Los invitados se levantan y miran hacia atrás fijando sus ojos en ella. Al sentir tantas miradas de golpe, Anna baja la suya y camina despacio
-No dejes que me caiga, Flo -dice como puede-
-Jamás -siguen andando pasito a pasito-
La cola del vestido rozando el suelo, pasos cortos pero firmes, un vestido entallado que realza el cuerpo de Anna y al fin llegan al altar. Los novios se miran fijamente a los ojos, Dani la sonríe como nunca antes lo había hecho es ella, la mujer con la que va a compartir el resto de sus días. Flo besa a Anna en la mejilla, coge la mano de Anna y se la entrega a Dani que la recibe encantado. Los invitados se sientan y comienza la ceremonia.
-Señoras y señores nos hemos reunido aqui hoy en este hermoso día para presenciar el enlace de Daniel Martínez y Anna Simon. Por favor, repite despues de mí- comienza el cura-
-No se preocupe, ya me lo sé -Dani se para frente a Anna y la coge de las manos- Yo, Dani Martínez te tomo a ti Anna Simon como legitima esposa
-En lo bueno y en lo malo -sigue Anna-
-En la riqueza y en la pobreza -continua Dani-
-En la salud y en la enfermedad
-Para amarte y respetarte
-Tanto como duren nuestras vidas.
-Si quiero -pronuncia Dani completamente seguro de lo que ha dicho-
-Si quiero- Anna hace lo mismo-
-Te amo
-Te amo
Y al fin sus labios se unen sellando esta promesa de amor eterno y duradero. Los invitados se levantan y aplauden, silvan y girtan "Vivan los novios" Mientras ellos dos, los protagonistas de esta bonita historia siguen inmersos en ese beso que parece no terminar nunca.
Llega la hora del banquete, del baile y de la juerga, la gente se lo está pasando genial, pasan a dar la enhorabuena a los recien casados
-Perdón se oye algo? -Nacho prueba el microfono de la orquesta para decir unas palabras- Quería proponer un brindis por mi nueva hermana. Anna.
Y así uno detrás de otro se sumaban a decir unas palabras de ambos de ellos, amigos cercanos, tios, primos... Llegó el momento de Flo, Anna tenñia unas ganas inmensas de escuchar lo que su padre de Madrid tenía que decir
-Dani es un buen marido y lo sé porque he trabajado con él dos años. Asíque Daniel cuidala bien o si no... cuidadito que fui vigilante de seguidad! -pone el toque de humor-
Llegó el momento de Dani
-Mi amor tú cambiaste mi vida por completo. Gracias a ti descubrí lo que verdaderamente es la felicidad. Nunca más he vuelto a sentirme vacío. Tú me has enseñado tantas cosas. Por ti me he convertido en lo que soy: un hombre feliz. Desde hace tiempo deseaba despertar todos los días a lado de una mujer tan hermosa y bondadosa como lo eres tú. Estoy muy feliz de que por fin haya llegado este día de convertirte en mi esposa. Me has hecho el hombre más feliz del mundo. Te amo princesa. -la lanza un beso que Anna recibe con una gran sonrisa y ahora llega su turno-
-Por todas esas cosas que haces por mí, por todas las veces que has tenido que aguantarme día y noche deprimida y aún así has insistido para verme sonreír, por todos esos consejos llenos de cosas buenas, por todos esos abrazos que me has dado cuando he estado mal, por ponerte en mi lugar muchas veces y comprenderme, y no hacerme sentir culpable de todo, por apoyarme en cualquier cosa aunque no estés de acuerdo conmigo...Simplemente por existir, gracias, porque gracias a ti soy mejor.Pase lo que pase, quiero que nunca acabe esto, porque te quiero.
